Son, nuestras almas son dos versos que se rozan.
Sé que al destino volveremos a engañar
porque no se acostumbre a nuestra rareza,
porque nunca más nos vuelva a manejar…
Dar contra un muro pa’ poderlo derribar,
que seguro nos depara una sorpresa,
si te atreves yo me atrevo a atravesar…
[Extremoduro]
Aunque esto lo que me apetece es susurrar(te)lo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario